Este erizo sensorial es una valiosa herramienta para estimular el lenguaje y fomentar la atención conjunta durante las sesiones terapéuticas. Sus colores vibrantes y piezas atractivas invitan a la interacción y ayudan a mantener el interés compartido entre el niño y la terapeuta. Además, al identificar colores y contar los pinchos, se refuerza el vocabulario, la comprensión verbal y la capacidad para seguir indicaciones.
Beneficios principales:
• Los pinchos de colores favorecen el reconocimiento de tonalidades y la familiarización con los números.
• Sus piezas están diseñadas para que las manos pequeñas las manipulen con facilidad.
• Al terminar la actividad, los pinchos se pueden guardar dentro del cuerpo del erizo, promoviendo hábitos de organización